Las cutículas: qué son, cómo cuidarlas

Se trata de una capa de piel cuya función principal es proteger la matriz de las uñas, evitando que penetre la humedad o posibles bacterias. Por ello, en el cuidado de las uñas, es fundamental tratar las cutículas con productos específicos, que permitan mantenerlas hidratadas, suaves y con aspecto saludable. Son unas de las principales protagonistas en el cuidado habitual para lucir unas uñas preciosas.

En ocasiones, crecen en exceso y ocupan parte del lecho ungueal, las uñas se ven más cortas y estéticamente no es favorecedor. Basta con hidratarlas diariamente con el aceite de uñas y cutículas Treasure Oil y así recuperan su flexibilidad: aplícalo preferiblemente por la noche y realiza un suave masaje para una mejor absorción. Su alta concentración en aceite de almendras puro, hidrata y restaura uñas y cutículas actuando en la matriz de las uñas. Puedes aplicarlo tanto en las manos como en los pies.

Una de las dudas más frecuentes es si es aconsejable cortarlas: no es recomendable hacerlo en su totalidad, su piel es muy fina y podríamos afectar a su función protectora.

En el momento de la manicura o la pedicura, puedes retirarlas aplicando previamente el Cuticle Softener: aplica y mantenlo durante un minuto, las hidratará y te facilitará el proceso de despejar tus uñas. Con la ayuda de un palito de naranjo empújalas hacia atrás con suavidad.

Solo si tienes pieles muertas sobrantes o padrastros puedes quitarlos con el alicate o tijera de pieles, o con el cortacutículas. El diseño de su punta, en acero inoxidable, permite retirar pequeñas pielecitas con toda seguridad y precisión.

Y recuerda, no te muerdas las uñas ni las cutículas si quieres mantenerlas bonitas y saludables. Si te cuesta resistirte, prueba No Bite Pro Growth de Beter Nail Care. Su sabor amargo y su fórmula, que las fortalece y estimula el crecimiento, son la solución.

Si quieres saber más sobre cómo cuidar tus uñas, te invitamos a ver el video “Manicura en casa paso a paso”.