Cuida tu melena en verano

Son múltiples factores los que afectan a la salud del cabello en verano: el cloro de la piscina, el agua salada, el pelo mojado y seco varias veces al día,  la radiación solar etc. La melena sufre y acaba pasando factura con encrespamiento, decoloración, puntas abiertas etc., hay que procurarle unos mínimos cuidados para mantenerlo lo más saludable posible.

Antes de bañarnos o de tomar el sol, podemos utilizar un buen protector con filtro solar específico para el cabello. Evitar exponerlo en las horas de mayor radiación solar e incluso cubrirnos la cabeza con una gorra, sombrero o un pañuelo. Son precauciones especialmente indicadas para cabellos teñidos. Los rayos UV pueden penetrar en la cutícula del cabello y dañarlo provocando sequedad, fragilidad y desgaste.

El cloro de las piscinas es un enemigo difícil de combatir. Un truco para proteger el cabello del cloro es humedecerlo con agua de la ducha antes de entrar en la piscina, ayuda a protegerlo de los efectos dañinos. Si la cutícula de tu cabello ya está saturada de agua, absorberá una cantidad significativamente menor de agua de la piscina que si el cabello estuviera seco.

Después del baño, lo mejor es utilizar un peine de púas anchas o un cepillo detangling Deslía o Natural Fiber, con púas en diferentes medidas que desenredan con suavidad y sin tirones. Es importante no secarlo frotando con la toalla ni escurrirlo enrollándolo, cuando está mojado es más débil y puede romperse. Mejor presionar con suavidad

con la toalla o envolverlo con la misma para que absorba la humedad.

Una vez finalizada la sesión de playa o piscina, es necesario enjuagar muy bien el pelo con agua fría o tibia. Si lo lavamos a diario, utilizaremos un champú hidratante y acondicionadores que lo reparen. Podemos aplicar una mascarilla capilar dos veces por semana, utiliza un gorro de ducha mientras la llevas puesta, el calor que desprende la cabeza potencia los resultados. Y es preferible prescindir del secador, pero si lo necesitas, mejor con aire frío.

También podemos recurrir a trucos caseros: cepillarnos a diario el pelo bien seco con un cepillo Deslía Bright Day, sus púas de jabalí proporcionan un brillo natural extraordinario al cabello. Al cepillarte se distribuyen los aceites naturales que produce el cuero cabelludo, desde la raíz hasta las puntas.

Después del verano, conviene sanear las puntas con un buen corte de pelo. Y no olvides mantener una alimentación adecuada, rica y variada. Disfrutar de los baños veraniegos, pero protegiéndote de la radiación solar.