¿Cómo limpias tus cepillos de cabello ?

En: 28 / 11 / 2017 Comentario: 0

Los cepillos y peines de cabello forman parte esencial de nuestro kit de belleza, existen de diversos tipos: de madera y cerdas naturales, neumáticos, térmicos, detangling Muchas de nosotras tenemos más de uno, el que utilizamos para desenredar el cabello antes o/y después de lavarlo, aquel con el que moldeamos el cabello, aquel que nos ayuda a alisarlo, el que llevamos al gimnasio, el que tenemos en el trabajo… Se trata de herramientas que acumulan cierta suciedad (polvo, pelo…) y que de vez en cuando necesitan una pequeña puesta a punto para mantener su efectividad y para la que es su principal función, cuidar el cabello. A continuación te detallamos las mejores formas para limpiarlos.

En el caso de los peines, puedes lavarlos directamente con agua y jabón neutro y secarlos cuidadosamente. Si quieres desinfectarlos más a fondo porque hace tiempo que no los has limpiado, puedes dejarlos sumergidos un bol con agua y un poco de alcohol o vinagre blanco o unas gotas de aceite de árbol de té durante unos 10 minutos, de este modo eliminarás las posibles bacterias que pueda haber. Tras ese tiempo, retíralos, acláralos y sécalos bien. Ten cuidado con los de madera, no son muy amigos del agua. 

En el caso de los cepillos, sea del tipo que sea, el primer paso es retirar todos los cabellos que hayan podido quedar en él, puedes ayudarte de un peine de púas finas o de cola de ratón para realizarlo. Una vez realizado este paso, introdúcelo durante un par de minutos en un bol con agua tibia y un poco de jabón (te funcionará tanto un jabón neutro como gel de baño o incluso champú). Lávalos suavemente con tus manos. Finalmente aclara bajo el grifo para acabar de retirar posibles restos de jabón. 



Después sécalos cuidadosamente con una toalla, es probable que no puedas retirar toda la humedad de las púas, si es así, déjalos secar en forma horizontal sobre una toalla con las cerdas boca abajo para que se escurra la humedad. 

Ten especial cuidado con tus cepillos de madera, recuerda que no son muy amigos del agua y no deben sumergirse. En este caso es mejor que limpies solo las cerdas con jabón, puedes utilizar un cepillo de dientes con un poco de agua y jabón para hacerlo, y finalmente aclararlo con cuidado bajo el grifo, previo paso a un secado exhaustivo con una toalla.  

Y ya tienes listos tus peines y cepillos para cuidar tu cabello.